Ronquidos
Tal era la vida de una joven valiente, que al llegar la medianoche se disponía a levantarse de la cama, aún habiéndose acostado sin ninguna intención posible de cerrar los ojos y dormir.
Tal era la vida de una joven valiente, que al llegar la medianoche se disponía a levantarse de la cama, aún habiéndose acostado sin ninguna intención posible de cerrar los ojos y dormir.