El Tamal
Tropiezos de un rosario de colores,
devotos del aprieto y la chacota,
se pintan entre negro y terracota
y cambian su nobleza en los hervores.
Tropiezos de un rosario de colores,
devotos del aprieto y la chacota,
se pintan entre negro y terracota
y cambian su nobleza en los hervores.
Tropiezos de un rosario de colores,
devotos del aprieto y la chacota,
se pintan entre negro y terracota
y cambian su nobleza en los hervores.
Sumario universal de los sabores,
monarca vitalicio en las cocinas
de donde emana y, a la vez, domina
la suave exhalación de tus picores.
Árido lienzo en caprichosos giros,
rugosa piel dispuesta a los quebrantos,
por ti el silencio pierde sus encantos
con voz atronadora de suspiros.